Autor: Manuel Osuna
Páginas: 241
Año de edición: 2018
Género: Thriller, Drama
Opinión personal
Este libro lo leí hace ya tiempo, pero no quería dejar pasar la ocasión de traéroslo porque de veras que merece la pena. Y es que los anteriores de Manuel Osuna (Laberintos y Hollywood Boulevard) me gustaron mucho; como estos son de relatos, quería ver qué tal se movía con Asomados al vacío, su primera novela.
La historia se ambienta en los 80 y sus protagonistas son adolescentes (ya solo con estos ingredientes me atrajo mucho). Ya en las primeras páginas conocemos a Ángel, un chico triste y enfadado con el mundo, pues el mundo se porta mal con él; su mundo más cercano, al menos. Su día a día en el colegio es un infierno, y cansado de burlas y humillaciones, cada vez está más a punto de romperse, de tirar la toalla y tomar una decisión desesperada. Por más sesiones con el psiquiatra tratando de encontrar algo de serenidad, su vida no parece cambiar en absoluto. Al contrario, cada mañana en el aula, o al final de sus horas lectivas, al salir al patio, la pesadilla se recrudece hasta límites insospechados.
Y no es que Ángel sea un muchacho sumiso y callado o que se deje pisotear, más bien todo lo contrario, pues tiene su orgullo, es solo que ha tenido la desgracia de coincidir con Mario en su misma clase, uno de esos especímenes con mucha labia y poco cerebro, que disfrutan haciendo sufrir al resto. Mario, anárquico y cruel por naturaleza, el típico matón de patio que no respeta ni a los profesores, y al que su camarilla de brutos y repetidores le ríe todas las gracias. Acostumbrado a ponerle motes a cada uno de sus compañeros (bien por un rasgo físico o de personalidad), vamos conociendo a todos los alumnos de esta clase de 8º B.
Porque eso sí, personajes hay bastantes. Cosa que al principio me inquietó, pero que luego vi que eran bien reconocibles, y que Manuel Osuna los lleva a todos para adelante magníficamente sin que haya confusión o despiste. Cada uno con sus miedos, sus inquietudes y sus pasiones secretas.
En un momento dado, más adelante, conocidos ya un poco por encima los distintos personajes, llega el día de una excursión escolar que tenían programada a las ruinas de un anfiteatro romano. Los chicos acogen el evento con ganas (cualquier cosa con tal de escapar de un soporífero día de clases), y suben al autobús.
Pero algo pasa por el camino, durante el viaje, que lo cambia todo. Una intensa experiencia que jamás olvidarán... y hasta aquí puedo leer, porque no quiero chafaros la sorpresa.
Estamos ante una novela coral, intrigante y absorbente, donde cada personaje tiene su propio interés, pues entre todos conforman las aristas de esta historia. Si tuviese que quedarme con uno favorito sería Laura, la única de la clase que no se deja arrastrar por lo que opine la mayoría y mira por el bien de Ángel.
"Ángel se levantó, abrió la mesita de Miguel y le cogió la cajetilla de Fortuna. Se encendió un cigarrillo y volvió a sentarse en la cama masajeándose la frente, como si aquel gesto ayudara a aclarar sus pensamientos.
-¿Desde cuándo fumas? -se extrañó ella.
-Empiezo hoy.
-Pues no te pega nada.
-Ah, ¿no? ¿Qué pasa, que fumar es de gente guay y yo no lo soy?
-No he dicho eso. Para mí, quien necesita tener un cigarro en la mano para creerse alguien, es que no es nadie. Y tú no eres así.
-¿Pero tú de qué me conoces? -contestó antes de toser-. ¿Qué sabrás cómo soy yo, niña?
-Nos conocemos desde preescolar, cuando íbamos juntos a sacar punta a la papelera y aprovechábamos para tirarnos allí media hora hablando -mencionó Laura viejos tiempos-. ¿Te acuerdas del año que me tocó ser tu amiga invisible?
-Me regalaste un cepillo de dientes -confirmó él con reproche.
-¡Bien chulo que era, con su pasta dentífrica a juego!
-Eso no se regala. Parece que llamas guarro al que se lo das.
-Perdona, no iba con indirecta. Igual es que somos un poco susceptibles. El que se pica, ajos come... Para mí era un buen regalo, que yo tenía otro igual.
-Que sí, que vale...
Ángel volvió a dar otra calada con evidente expresión de desagrado y terminó espachurrando el cigarro contra la mesita metálica."
Leí en su día algunas reseñas donde decían que ciertos comportamientos agresivos eran algo impropios para personajes de estas edades, y quería añadir mi opinión, diciendo que no estoy nada de acuerdo. En mi época (y lo sé porque siempre he trabado amistad con el perdedor, del que los demás abusaban), por aquellos años convulsos en los que éramos todo hormonas y el sobrellevar una imagen, había auténticos cabroncetes a los que los adultos no solían prestar mucha atención, mentes sádicas que disfrutaban torturando a un animal indefenso o ridiculizando a ese chico diferente al resto. Esto del bullying solo es una palabra de ahora, la hijoputez ha existido de siempre. Así que, por mi parte, la novela retrata con brillantez ciertas conductas juveniles.
Sabéis, cuando el autor de un libro es amigo, y en este caso un muy buen amigo (nada menos que el responsable del prólogo de El niño pájaro), me asalta cierta inquietud. ¿Y si no me gusta? No quiero ser hipócrita con los que me leéis, y si un libro me deja frío os lo digo. Si, peor aún, no me ha gustado, directamente no lo reseño (flaco favor le hago al autor). Sin embargo, cuando un libro me ha encantado, como ha sido el caso de Asomados al vacío, me alegra tanto... Y al mismo tiempo me cabrea que no tenga más fama que, quizá, esos bestsellers o esas novedades de grandes editoriales que se anuncian por ahí a bombo y platillo y que no merecen ni la mitad del reconocimiento. No obstante, al poco de yo leerlo se llevó el premio a la mejor novela de 2019 de Editorial Círculo Rojo, lo cual me hizo mucha ilusión.
Al margen del dramatismo y la angustia que la novela de Manuel nos hace pasar, me resultó muy amena y refrescante, transportándome a esos años de la EGB, haciendo aflorar en mí esa nostalgia ochentera, pues el libro está cargado de referencias culturales de la época (expresiones, tacos, películas, música, libros y revistas, juegos, programas y anuncios de la tele, cosas que se hacían entonces y maneras de relacionarnos antes de que llegara el móvil, el internet y otras moderneces...). Por cierto, si no lo digo reviento, me encantó el guiño a Emilio el del videoclub (mi personaje favorito de Laberintos).
Sin duda el mejor libro del autor hasta la fecha, tanto me gustó, que estará entre mis mejores lecturas del año. Una entretenidísima novela que os beberéis a grandes tragos y que os garantizo no os dejará indiferentes.
La historia se ambienta en los 80 y sus protagonistas son adolescentes (ya solo con estos ingredientes me atrajo mucho). Ya en las primeras páginas conocemos a Ángel, un chico triste y enfadado con el mundo, pues el mundo se porta mal con él; su mundo más cercano, al menos. Su día a día en el colegio es un infierno, y cansado de burlas y humillaciones, cada vez está más a punto de romperse, de tirar la toalla y tomar una decisión desesperada. Por más sesiones con el psiquiatra tratando de encontrar algo de serenidad, su vida no parece cambiar en absoluto. Al contrario, cada mañana en el aula, o al final de sus horas lectivas, al salir al patio, la pesadilla se recrudece hasta límites insospechados.
Y no es que Ángel sea un muchacho sumiso y callado o que se deje pisotear, más bien todo lo contrario, pues tiene su orgullo, es solo que ha tenido la desgracia de coincidir con Mario en su misma clase, uno de esos especímenes con mucha labia y poco cerebro, que disfrutan haciendo sufrir al resto. Mario, anárquico y cruel por naturaleza, el típico matón de patio que no respeta ni a los profesores, y al que su camarilla de brutos y repetidores le ríe todas las gracias. Acostumbrado a ponerle motes a cada uno de sus compañeros (bien por un rasgo físico o de personalidad), vamos conociendo a todos los alumnos de esta clase de 8º B.
Porque eso sí, personajes hay bastantes. Cosa que al principio me inquietó, pero que luego vi que eran bien reconocibles, y que Manuel Osuna los lleva a todos para adelante magníficamente sin que haya confusión o despiste. Cada uno con sus miedos, sus inquietudes y sus pasiones secretas.
En un momento dado, más adelante, conocidos ya un poco por encima los distintos personajes, llega el día de una excursión escolar que tenían programada a las ruinas de un anfiteatro romano. Los chicos acogen el evento con ganas (cualquier cosa con tal de escapar de un soporífero día de clases), y suben al autobús.
Pero algo pasa por el camino, durante el viaje, que lo cambia todo. Una intensa experiencia que jamás olvidarán... y hasta aquí puedo leer, porque no quiero chafaros la sorpresa.
Estamos ante una novela coral, intrigante y absorbente, donde cada personaje tiene su propio interés, pues entre todos conforman las aristas de esta historia. Si tuviese que quedarme con uno favorito sería Laura, la única de la clase que no se deja arrastrar por lo que opine la mayoría y mira por el bien de Ángel.
"Ángel se levantó, abrió la mesita de Miguel y le cogió la cajetilla de Fortuna. Se encendió un cigarrillo y volvió a sentarse en la cama masajeándose la frente, como si aquel gesto ayudara a aclarar sus pensamientos.
-¿Desde cuándo fumas? -se extrañó ella.
-Empiezo hoy.
-Pues no te pega nada.
-Ah, ¿no? ¿Qué pasa, que fumar es de gente guay y yo no lo soy?
-No he dicho eso. Para mí, quien necesita tener un cigarro en la mano para creerse alguien, es que no es nadie. Y tú no eres así.
-¿Pero tú de qué me conoces? -contestó antes de toser-. ¿Qué sabrás cómo soy yo, niña?
-Nos conocemos desde preescolar, cuando íbamos juntos a sacar punta a la papelera y aprovechábamos para tirarnos allí media hora hablando -mencionó Laura viejos tiempos-. ¿Te acuerdas del año que me tocó ser tu amiga invisible?
-Me regalaste un cepillo de dientes -confirmó él con reproche.
-¡Bien chulo que era, con su pasta dentífrica a juego!
-Eso no se regala. Parece que llamas guarro al que se lo das.
-Perdona, no iba con indirecta. Igual es que somos un poco susceptibles. El que se pica, ajos come... Para mí era un buen regalo, que yo tenía otro igual.
-Que sí, que vale...
Ángel volvió a dar otra calada con evidente expresión de desagrado y terminó espachurrando el cigarro contra la mesita metálica."
Leí en su día algunas reseñas donde decían que ciertos comportamientos agresivos eran algo impropios para personajes de estas edades, y quería añadir mi opinión, diciendo que no estoy nada de acuerdo. En mi época (y lo sé porque siempre he trabado amistad con el perdedor, del que los demás abusaban), por aquellos años convulsos en los que éramos todo hormonas y el sobrellevar una imagen, había auténticos cabroncetes a los que los adultos no solían prestar mucha atención, mentes sádicas que disfrutaban torturando a un animal indefenso o ridiculizando a ese chico diferente al resto. Esto del bullying solo es una palabra de ahora, la hijoputez ha existido de siempre. Así que, por mi parte, la novela retrata con brillantez ciertas conductas juveniles.
Sabéis, cuando el autor de un libro es amigo, y en este caso un muy buen amigo (nada menos que el responsable del prólogo de El niño pájaro), me asalta cierta inquietud. ¿Y si no me gusta? No quiero ser hipócrita con los que me leéis, y si un libro me deja frío os lo digo. Si, peor aún, no me ha gustado, directamente no lo reseño (flaco favor le hago al autor). Sin embargo, cuando un libro me ha encantado, como ha sido el caso de Asomados al vacío, me alegra tanto... Y al mismo tiempo me cabrea que no tenga más fama que, quizá, esos bestsellers o esas novedades de grandes editoriales que se anuncian por ahí a bombo y platillo y que no merecen ni la mitad del reconocimiento. No obstante, al poco de yo leerlo se llevó el premio a la mejor novela de 2019 de Editorial Círculo Rojo, lo cual me hizo mucha ilusión.
Al margen del dramatismo y la angustia que la novela de Manuel nos hace pasar, me resultó muy amena y refrescante, transportándome a esos años de la EGB, haciendo aflorar en mí esa nostalgia ochentera, pues el libro está cargado de referencias culturales de la época (expresiones, tacos, películas, música, libros y revistas, juegos, programas y anuncios de la tele, cosas que se hacían entonces y maneras de relacionarnos antes de que llegara el móvil, el internet y otras moderneces...). Por cierto, si no lo digo reviento, me encantó el guiño a Emilio el del videoclub (mi personaje favorito de Laberintos).
Sin duda el mejor libro del autor hasta la fecha, tanto me gustó, que estará entre mis mejores lecturas del año. Una entretenidísima novela que os beberéis a grandes tragos y que os garantizo no os dejará indiferentes.
Me gusta mucho el punto de partida y la ambientación, y por lo que cuentas con mucha más calidad que otras novelas con mucho favor comercial. Por lo que cuentan en otras reseñas creo que lo que pasa después no me iba a gustar mucho, empezando por el lugar. La verdad es que me quedo con las dudas.
ResponderEliminarY sí, es una presión cuando conoces al autor, menos mal que he salido bien.
Besos
Hazme caso, solo por la ambientación y los personajes ya te gana (sobre todo si has crecido en aquellos años). Y respecto a lo que ocurre "después", es el verdadero enganche de la novela, la chicha digamos de la historia.
EliminarUn beso Norah ;)
La ambientación también me llama mucho y me dejas con la intriga de saber qué pasa en el camino... Tomo nota.
ResponderEliminarBesotes!!!
No te defraudará, Margari. Canela en rama.
EliminarUn beso ;)
Yo también conozco a Manuel, y con los conocidos me pasa lo mismo que a ti... Pero me encantó <3
ResponderEliminarSí, verdad? A veces te sientes dividido entre ese conocido y tus impresiones reales.
EliminarPues qué bien que en esta ocasión hayamos coincidido. Es un autor que no defrauda.
Un beso Tamara ;)
He leído unas cuantas reseñas del libro y tengo que decir que no me habría fijado en él si no fuera porque casi todas hablaban genial de su historia. Sí que echaba para atrás que quizás fuera algo juvenil para mí...pero creo que tengo que quitarme esa idea de la cabeza, veo que merece mucho la pena ;)
ResponderEliminarBesitos
Juvenil solo en su justa medida, porque tiene escenas crudas y algunos personajes están tratados con cierta profundidad, y la trama te mantiene en vilo hasta la última página. En serio, muy recomendado, Cris.
EliminarUn beso ;)
La leí el año pasado, más o menos por estas fechas, y me gustó bastante. Una novela muy recomendable.
ResponderEliminarBesos
Pues un año después, me alegra que coincidamos, jajaja. Manuel es un narrador de primera, y lo que cuenta, lo cuenta bonito.
EliminarUn beso Aylavella ;)
Me gustó mucho, el género me encanta y el estilo de Osuna me atrapó de inmediato 🤗
ResponderEliminarBesitos 💋💋💋
A que sí? ^^
EliminarTe recomiendo sus anteriores libros (uno de relatos y otro de microrrelatos), si es que no lo has hecho ya, porque merecen mucho la pena.
Un beso Yolanda ;)
¡Hola! Pues nada más por lo que has comentado de que te ha gustado y que te gustaría que fuera más conocido, me lo llevo apuntado. También por lo que trata, claro, pero oye, tenemos que dar a conocer todos los libros que nos gustan :D (y los que no también), sean de amigos o no. Un beso.
ResponderEliminarPues nada, ya me contarás si llegas a leerlo. Apuesto a que te gustará.
EliminarUn beso ;)
Lo que da de si un libro. Por la portada no me hubiera llamado la atención, pero es que no soy mucho de relatos, ya sabes, y no había leído al autor. Ahora viendo de lo que va, me encanta. Para mi también sería muy buena lectura.
ResponderEliminarB7s
Leo la lluvia caer
No son relatos, Ali, es una novela. De relatos son sus anteriores libros. Espero que le des una oportunidad, es un autor que merece mucho la pena.
EliminarUn beso ;)
¡Hola! Me alegra que lo hayas disfrutado mucho...Los buenos personajes y que esté ambientada en los 80's me animan a leer este libro. Muchas gracias por la reseña. ¡Besos!
ResponderEliminarYa verás cómo te sorprende y te trae recuerdos de aquella época.
EliminarUn beso Marita ;)
En principio no lo leería pero me has intrigado :-)
ResponderEliminarBesos.
Todo es probar. Te aseguro que una vez pruebes con algún libro de Manuel Osuna querrás repetir.
EliminarUn beso Anabel ;)
Hola Ray!! Nunca me habría fijado en este libro sino hubiera leído tu reseña, tomo buena nota. ¡Estupenda reseña! Besos!!
ResponderEliminarMe alegra que por lo menos haya conseguido picarte la curiosidad. Merece mucho la pena, Ana.
EliminarUn beso ;)
Hola!
ResponderEliminarLa trama no me llama demasiado, lo paso mal con el tema del bullying y acoso escolar. Me ha encantado conocer más sobre el libro, pero por desgracia no creo que vaya a gustarme. Me alegro mucho de que le dieran el premio de mejor libro de la editorial.
Saludos
Bueno, más allá del tema del acoso, la verdadera trama, el misterio que surge en la segunda mitad del libro, es atrapante.
EliminarUn beso ;)
¡Holaaa!
ResponderEliminarPues no conocía al autor pero que bien que lo hayas dado a conocer, y desde luego me alegra que te haya encantado tanto siendo el autor tu amigo ;)
En fin, me lo apuntaré, aunque ahora mismo no estoy en un momento en el que me apetezca leer sobre tema bullying, pero para un futuro ^^
¡muchos besos!
En realidad no es el tema central, es más bien un thriller con tintes juveniles, pero los personajes y la época están tan bien construidos que cuando vas llegando al final no quieres que se acabe la historia.
EliminarUn beso Irene ;)
Pues no lo conocóa, pero pese a tus impresiones, no tengo claro que sea un título para mí. Un beso!
ResponderEliminarA por otro entonces si no lo tienes claro, Rocío. Será por libros...
EliminarUn beso ;)
¡Hola! ^^
ResponderEliminarPor lo que dices en la reseña y la nota tan buena que le has dado se nota que te ha gustado mucho, pero el tema que trata este libro no me atrae demasiado, así que lo dejaré pasar.
Besos!
Bueno, no a todos nos puede gustar lo mismo, qué aburrido sería si no.
EliminarUn beso Mary ;)
Hola!
ResponderEliminarno lo conocía pero creo que puede gustarme mucho
Gracias por tu reseña
un besito ♡
A ti por pasarte a comentar, Naya.
EliminarUn beso ;)
No había leído ninguna reseña hasta ahora y mira que pensaba que no me iba a atraer...pero con tu reseña me has hecho dudar...
ResponderEliminarUn beso!
Pues no te lo pienses mucho y lánzate a por él. La historia lo tiene todo.
EliminarUn beso Lesin ;)
Hola.
ResponderEliminarPues la verdad es que no lo conocía pero desde luego que me lo apunto, ahora mismo tengo la tira de pendientes que ya están mis lecturas del verano escogidas, pero tengo que decir que no me iré sin apuntarlo para más adelante, ya quiero saber que pasa en esa excursión.
Muchos besos.
Ya, qué me vas a contar, lo que nos pasa a todos, desbordados con tantas lecturas pendientes. Pero créeme, tanto el libro como el autor, canela en rama.
EliminarUn beso Rubí ;)
Reconozco que no es un libro que suela leer pero con tu reseña me dejas con mucha curiosidad, ahora mismo estoy muy enganchada al romance histórico pero quién sabe si algún día vuelva a este tipo de historias.
ResponderEliminarBesos =)
Pues nada, ya lo que te pida el cuerpo.
EliminarUn beso Atrapada ;)
¡Hola!
ResponderEliminarMi época de instituto es la de principios de los 2000, pero controlo de referencias gracias a mi hermano mayor, que nos enseñaba todo lo que "había que saber" XD
Me llama para bien, me lo apunto.
En cuanto a lo que dices de que los escritores sean colegas, te entiendo, me sentí así contigo y con Anabel, obviamente no sois mis amigos como lo es Manuel Osuna para ti, pero sí que hay una relación "virtual" y, claro, tenía un poco de miedo por si no me gustaban, ya que quería reseñaros siendo totalmente sincera, pues al final se lo debemos a todos los que nos leen. Menos mal que sois buenos XD
Ay, a ver si me pongo con El niño pájaro, que solo me falta ese.
¡Un saludoo!
Bueno, aunque Manu es amigo, nunca nos vimos en persona, así que podríamos decir también que es una relación virtual, jajaja. Me alegro que te lo lleves apuntado, te gustará.
EliminarUn beso Rachel ;)
Ay, ay , ay.... Nunca hubiera imaginado una novela así. Ahora que leo bastantes libros de esta editorial no me queda más remedio que anotarlo.
ResponderEliminarGracias por esta reseña.
Un besazo ;P
Estupendo. Pues ya me contarás qué tal si llegas a hincarle el diente.
EliminarUn beso ;)
El libro es como el escritor increíblemente bueno. Lo recomiendo mucho!!!
ResponderEliminarAsí es, Patricia. Si como escritor es estupendo, como persona es mejor todavía.
EliminarUn beso ;)
¡Madre mía! ¡Y yo sin haber visto aún esta reseña!
ResponderEliminarMuchas gracias, amigo, me encantan tus palabras porque desprenden entusiasmo, y ya sabes que lo mejor que le puede pasar a un escritor es que los demás disfruten tanto de la historia. Sospechaba yo, de todas formas, que te iba a gustar, porque eres muy ochenteno y te encantan la sangre y el humor (a veces negro).
Has explicado perfectamente qué se va a encontrar el lector cuando se asome al vacío, sin destripar nada (bonito verbo: destripar) y me alegra que coincidamos en la opinión sobre los personajes y su comportamiento. Recordamos aquella época con nostalgia, pero no te pierdas de vista la flora y fauna que habitaba los colegios de EGB. Si Laura es tu personaje favorito, yo siento debilidad por Ángel, pero creo que todos tenemos una mezcla de ambos: esa parte optimista de ella y esa visión amarga e impotente de él, sin perder la espontaneidad de Cheli, que representa ese niñ@ que todavía muchos conservamos.
Lo dicho, gracias infinitas por tu opinión y por tu apoyo. Me consta que te alegraste mucho por el premio Círculo Rojo a la Mejor Novela de Ficción, porque se demuestra que, en ocasiones, el trabajo de los escritores se ve recompensado. ¡Nos leemos! ¡Un abrazote!
Pues sí, para mí el libro tiene un poco de todo. Totalmente de acuerdo con eso de que todos tenemos un poco de ambos personajes (también de Cheli, jajaja, otro de mis personajes favoritos, lo que me he reído con ella...).
EliminarGracias a ti, amigo.
Un abrazo ;)
Si no fuera por la reseña no me habría llamado la atención. Lo malo de apuntarme más libros es que no me da tiempo a tantos y al final hay que priorizar.
ResponderEliminarBesos!
Claro, lo normal en los que hacemos de esto de la lectura una forma de vida. Si lo lees algún día ya me contarás, es una historia de estas que no se olvidan fácilmente.
EliminarUn beso Alicia ;)
Hola!
ResponderEliminarVi que había ganado el premio y no me extraña ^^ Recuerdo que esta novela me sorprendió mucho porque no fue para nada lo que yo esperaba y eso me encantó xD En cuanto a la violencia... a mí no me cuadraron algunas actitudes de los personajes por la edad que tenían, porque en un momento dado me parecían críos (recuerdo especialmente a un grupito haciendo el indio) y al siguiente su comportamiento sexual me parecía desmesurado para su edad, aunque quizás es solo que preferiría que a esas edades no estén tan "crecidos" xD Lo de la violencia no me pareció desmesurado, es lo que dices tú, es algo que ha existido siempre y se han visto cosas aún peores, incluso con niños aún más pequeños.
Un beso!
No recuerdo ninguna escena subida de tono en el libro (si la memoria no me falla, porque ya hace sus mesecitos que lo leí), aunque si la hubiera habido tampoco me hubiera parecido extraña; a los 14, que es la edad de los personajes, es cuando se desarrolla el despertar sexual y las hormonas se disparan. Pero bueno, en una cosa estamos de acuerdo, y es que a los dos nos sorprendió para bien.
EliminarUn beso Lit ;)
Hola!
ResponderEliminarSi, la joputez es algo de toda la vida y que se ha sufrido en mayor o menor medida.
En cuanto al libro, ¿Qué pasó en el autobús? Dejas a quien lee la reseña con toda la intriga, por no hablar del detalle del cepillo de dientes que me ha hecho mucha gracia.
Sin duda merecerá la pena leerlo.
Besos!
Estoy seguro de que te encantaría. Espero que te animes con él, María.
EliminarUn beso ;)
Veo que me estoy perdiendo grandes libros, por dejarme llevar por querer leer menos géneros. Voy a tener que tomar medidas oportunas. Porque este libro tiene pintaza.
ResponderEliminarB7s
−Leo la lluvia caer−
Sí, Ali, este es muy recomendable. A mí me encantó.
EliminarUn beso ;)
Pues lo cierto es que me llama bastante la atención, aunque para mí la portada no es adecuada, a punto estuve de descartarlo porque pensaba que sería un drama en un hospital...
ResponderEliminarEntre tú y yo, la portada no le hace justicia a la pedazo de historia que se esconde entre sus páginas.
EliminarUn beso ;)