Autor: Gav Thorpe
Páginas: 239
Año de edición: 2006
Género: Fantástico
Opinión personal
Siempre me cuesta expresar con palabras, o ser fiel a mis emociones, cuando una historia me ha encantado, y esta ya os adelanto que me ha hecho pasar muy buenos ratos. Por las noches, cuando me sumergía entre sus páginas, en las profundidades de la montaña, en las cavernas junto a estos personajes, disfrutaba como un enano, y nunca mejor dicho, porque de eso va El custodio de agravios. Pero vayamos por partes, ¿de qué va?
Ambientada en el mundo de Warhammer, cuenta la historia del reino de Zhufbar, uno de los varios reinos enanos, de cómo su rey Throndin Corazón de Piedra es llamado a prestar ayuda a un barón humano llamado Vessal, en las tierras vecinas, pues una ingente masa verde de orcos se aproxima amenazando con exterminarlos a todos. Salvo algunas contadas escaramuzas, durante largo tiempo el enemigo ha estado a la sombra, multiplicándose, esperando el momento oportuno para asestar el golpe fatal, y el nefasto momento está cerca.
Para cerrar el trato, el noble humano le obsequia a Throndin con un arcón repleto de oro (la perdición de los enanos), prometiéndole varios más al terminar la batalla... En el caso de que sobrevivan.
Llegado el gran día, el rey enano abandona Zhufbar a la cabeza de su sólido ejército (una élite de guerreros y maquinaria pesada de guerra), dejando vacíos los salones y las innumerables cámaras bajo la montaña. Cuando llegan al lugar de la batalla, y ven el vasto océano de cabezas de orcos aproximándose en el horizonte, enseguida son conscientes de que ni con la ayuda del ejército humano son equiparables a tal amenaza. Mas no se amedrentan, pues la palabra de un enano es sagrada. El ejército de pieles verdes los supera en número varias veces, pero, a diferencia de los humanos, que empiezan a temblar de pánico, los enanos se mantienen firmes en su posición, ansiosos por derramar sangre.
El viejo rey enano manda traer el gran Libro de los agravios (un pesado volumen donde vienen apuntadas todas las fechorías y humillaciones que ha ido sufriendo su linaje por parte de distintos enemigos a lo largo de siglos), y consulta entre sus polvorientas páginas en busca de los agravios sufridos por los pieles verdes, que al parecer son bastantes. Lanza un juramento, y tras cerrarlo y dejarlo a buen recaudo, se prepara para embestir la oleada de frenesí y destrucción que se aproxima en la distancia.
"Throndin les hizo una señal a los portadores de la piedra. Éstos avanzaron con un gran trozo de granito que estaba cortado en forma de escalón largo y plano, y que había sido decorado con runas talladas. Sujetándola por las anillas de hierro que atravesaban los extremos, depositaron la piedra del agravio ante el rey. Throndin les hizo un gesto de asentimiento con la cabeza, y luego se volvió para encararse con su ejército, que guardó silencio.
-Aquí deposito la piedra del agravio de Zhufbar, y aquí nos quedaremos -declaró con voz clara, que se impuso al tumulto de orcos-. O me alzaré con la victoria de pie sobre esta piedra del agravio, o seré enterrado bajo ella. Que ningún enano retroceda un paso a partir de esta línea. ¡Muerte o victoria!
Con gran ceremonia, Throndin subió a la piedra y se descolgó del torso el hacha de hoja ancha. La levantó por encima de la cabeza, y los enanos lo aclamaron. A una señal del rey, la batalla comenzó."
Durante la batalla, los enanos combaten con fiereza hasta más allá de sus fuerzas, pero parece no ser suficiente, el enemigo los triplica y, para colmo, el barón Vessal, atemorizado, se quita de en medio junto con su ejército, dejando a sus supuestos aliados a merced de las hordas.
El rey muere luchando hasta el final, y semanas después, su hijo Barundin (el verdadero protagonista de esta historia), que luchó junto a su padre en la batalla, hereda el manto real, coronándose como nuevo rey. Pero todo gran cargo lleva una gran responsabilidad, y entre las muchas que a partir de ahora le aguardan, la más importante (al menos en su corazón) es cumplir el solemne juramento de venganza, y acabar con la vida del traidor humano que llevó a la muerte a su padre.
Sin embargo, para su desconcierto, cuando el Señor de las Runas (el enano más sabio del reino, consejero y mano derecha de su difunto padre, y ahora a su servicio) le pone por delante el gran Libro de los agravios, descubre con asombro la larga lista de agravios que hay escritos antes del último (el de vengar la muerte de su padre), y que, como rey, debe darles prioridad, resolviéndolos uno a uno hasta tacharlos de la lista como manda la tradición. Algo que tranquilamente podría llevarle años, décadas o siglos, pues un enano jamás olvida. Y tal vez ese sea el problema.
"Respeta a tus ancestros, nunca confíes en un elfo y jamás olvides una ofensa."
Lo que resulta más curioso es que, debido a la gran longevidad de esta raza, los enanos cuentan con cientos de años para resolver sus asuntos y ajusticiar a aquellos por los que juraron venganza, sin embargo, al ir amontonando tantos agravios, a veces se les olvida que los demás (aquellos de otras razas) no disponen de tantos años de vida, y tal vez no estén ahí cuando les toque ser ajusticiados.
A lo largo de la historia veremos cómo Barundin intenta llevar a su pueblo a buen puerto, teniendo que anteponer los deseos de vengar a su padre a problemas que parecen más apremiantes, como saldar antiguos agravios de su linaje que se remontan muy lejos en el tiempo, diferencias entre los distintos clanes enanos de su reino, decisiones diplomáticas con otros reinos enanos, o enemigos que amenazan su propia fortaleza bajo la montaña, llegando a tener que librar batallas con las que no contaba.
"Como nubes de dientes, zarpas y ojos inexpresivos, cientos y más cientos de ratas irrumpieron en el Cuarto Salón Inferior y rodearon al Vidente Gris. En una apretada masa de porquería pulgosa, las ratas salían de la entrada del pasadizo, corrían por el suelo y pasaban por encima de los skavens. Las alimañas continuaron adelante hasta llegar a la primera línea de enanos. Los guerreros de Barundin golpeaban con martillos y hachas, pero contra la marea de criaturas era poco lo que podían hacer.
Los enanos manoteaban mientras docenas de ratas se movían por el interior de las armaduras, mordiéndolos y arañándolos, clavándoles las garras en la cara, enredándoseles en las barbas mientras garras y colmillos les laceraban y perforaban la piel. Aunque cada mordisco era poco más que un alfilerazo, cada vez era mayor el número de roedores, cuya mordedura estaba contaminada con vil veneno.
Barundin avanzó un paso para unirse a la refriega, pero lo detuvo Arbrek, que le posó una mano sobre su hombro.
-Esto es brujería -declaró el Señor de las Runas con expresión decisiva-. Yo me encargaré."
Por ponerle alguna pega, pues en realidad no tiene ninguna, hay momentos en los que, a lo mejor, entre una página y otra han pasado diez años tranquilamente, hecho que, si no te fijas bien, desconcierta. Hay que prestar mucha atención a estos detalles para no liarnos. Pero es solo en ocasiones puntuales.
Resumiendo, esta es la historia de Barundin, un rey enano, al principio algo joven y novato al jurar el cargo (tiene gracia lo de joven, pues tiene 150 años, apenas nada para los de su raza), que es observado con lupa por todos sus súbditos, cuya inexperiencia hace que cada decisión que tome sea seguida al detalle por los distintos dirigentes de su pueblo, y que, con el pasar de los años y cantidad de inconvenientes en el camino, irá madurando hasta convertirse en un digno rey para los suyos.
Sé que por aquí no son muy de fantasía épica, pero si algún día deciden aventurarse con este libro, que por cierto es muy cortito, estaré encantado de conocer sus impresiones. A mí me ha encantado; al margen de las batallas, a cuál más emocionante, he descubierto un sinfín de curiosidades de esta raza (mi favorita dentro del género fantástico), sobre su marcada personalidad, sus aspiraciones, las relaciones que tienen con otros pueblos, sus laberínticos y majestuosos hogares bajo la tierra, la artesanía y el poder de sus runas, sus dioses, sus obsesiones, su lealtad y coraje... En fin, aventuras geniales para abstraerse de los problemas mundanos.
Ambientada en el mundo de Warhammer, cuenta la historia del reino de Zhufbar, uno de los varios reinos enanos, de cómo su rey Throndin Corazón de Piedra es llamado a prestar ayuda a un barón humano llamado Vessal, en las tierras vecinas, pues una ingente masa verde de orcos se aproxima amenazando con exterminarlos a todos. Salvo algunas contadas escaramuzas, durante largo tiempo el enemigo ha estado a la sombra, multiplicándose, esperando el momento oportuno para asestar el golpe fatal, y el nefasto momento está cerca.
Para cerrar el trato, el noble humano le obsequia a Throndin con un arcón repleto de oro (la perdición de los enanos), prometiéndole varios más al terminar la batalla... En el caso de que sobrevivan.
Llegado el gran día, el rey enano abandona Zhufbar a la cabeza de su sólido ejército (una élite de guerreros y maquinaria pesada de guerra), dejando vacíos los salones y las innumerables cámaras bajo la montaña. Cuando llegan al lugar de la batalla, y ven el vasto océano de cabezas de orcos aproximándose en el horizonte, enseguida son conscientes de que ni con la ayuda del ejército humano son equiparables a tal amenaza. Mas no se amedrentan, pues la palabra de un enano es sagrada. El ejército de pieles verdes los supera en número varias veces, pero, a diferencia de los humanos, que empiezan a temblar de pánico, los enanos se mantienen firmes en su posición, ansiosos por derramar sangre.
El viejo rey enano manda traer el gran Libro de los agravios (un pesado volumen donde vienen apuntadas todas las fechorías y humillaciones que ha ido sufriendo su linaje por parte de distintos enemigos a lo largo de siglos), y consulta entre sus polvorientas páginas en busca de los agravios sufridos por los pieles verdes, que al parecer son bastantes. Lanza un juramento, y tras cerrarlo y dejarlo a buen recaudo, se prepara para embestir la oleada de frenesí y destrucción que se aproxima en la distancia.
"Throndin les hizo una señal a los portadores de la piedra. Éstos avanzaron con un gran trozo de granito que estaba cortado en forma de escalón largo y plano, y que había sido decorado con runas talladas. Sujetándola por las anillas de hierro que atravesaban los extremos, depositaron la piedra del agravio ante el rey. Throndin les hizo un gesto de asentimiento con la cabeza, y luego se volvió para encararse con su ejército, que guardó silencio.
-Aquí deposito la piedra del agravio de Zhufbar, y aquí nos quedaremos -declaró con voz clara, que se impuso al tumulto de orcos-. O me alzaré con la victoria de pie sobre esta piedra del agravio, o seré enterrado bajo ella. Que ningún enano retroceda un paso a partir de esta línea. ¡Muerte o victoria!
Con gran ceremonia, Throndin subió a la piedra y se descolgó del torso el hacha de hoja ancha. La levantó por encima de la cabeza, y los enanos lo aclamaron. A una señal del rey, la batalla comenzó."
Durante la batalla, los enanos combaten con fiereza hasta más allá de sus fuerzas, pero parece no ser suficiente, el enemigo los triplica y, para colmo, el barón Vessal, atemorizado, se quita de en medio junto con su ejército, dejando a sus supuestos aliados a merced de las hordas.
El rey muere luchando hasta el final, y semanas después, su hijo Barundin (el verdadero protagonista de esta historia), que luchó junto a su padre en la batalla, hereda el manto real, coronándose como nuevo rey. Pero todo gran cargo lleva una gran responsabilidad, y entre las muchas que a partir de ahora le aguardan, la más importante (al menos en su corazón) es cumplir el solemne juramento de venganza, y acabar con la vida del traidor humano que llevó a la muerte a su padre.
Sin embargo, para su desconcierto, cuando el Señor de las Runas (el enano más sabio del reino, consejero y mano derecha de su difunto padre, y ahora a su servicio) le pone por delante el gran Libro de los agravios, descubre con asombro la larga lista de agravios que hay escritos antes del último (el de vengar la muerte de su padre), y que, como rey, debe darles prioridad, resolviéndolos uno a uno hasta tacharlos de la lista como manda la tradición. Algo que tranquilamente podría llevarle años, décadas o siglos, pues un enano jamás olvida. Y tal vez ese sea el problema.
"Respeta a tus ancestros, nunca confíes en un elfo y jamás olvides una ofensa."
Lo que resulta más curioso es que, debido a la gran longevidad de esta raza, los enanos cuentan con cientos de años para resolver sus asuntos y ajusticiar a aquellos por los que juraron venganza, sin embargo, al ir amontonando tantos agravios, a veces se les olvida que los demás (aquellos de otras razas) no disponen de tantos años de vida, y tal vez no estén ahí cuando les toque ser ajusticiados.
A lo largo de la historia veremos cómo Barundin intenta llevar a su pueblo a buen puerto, teniendo que anteponer los deseos de vengar a su padre a problemas que parecen más apremiantes, como saldar antiguos agravios de su linaje que se remontan muy lejos en el tiempo, diferencias entre los distintos clanes enanos de su reino, decisiones diplomáticas con otros reinos enanos, o enemigos que amenazan su propia fortaleza bajo la montaña, llegando a tener que librar batallas con las que no contaba.
"Como nubes de dientes, zarpas y ojos inexpresivos, cientos y más cientos de ratas irrumpieron en el Cuarto Salón Inferior y rodearon al Vidente Gris. En una apretada masa de porquería pulgosa, las ratas salían de la entrada del pasadizo, corrían por el suelo y pasaban por encima de los skavens. Las alimañas continuaron adelante hasta llegar a la primera línea de enanos. Los guerreros de Barundin golpeaban con martillos y hachas, pero contra la marea de criaturas era poco lo que podían hacer.
Los enanos manoteaban mientras docenas de ratas se movían por el interior de las armaduras, mordiéndolos y arañándolos, clavándoles las garras en la cara, enredándoseles en las barbas mientras garras y colmillos les laceraban y perforaban la piel. Aunque cada mordisco era poco más que un alfilerazo, cada vez era mayor el número de roedores, cuya mordedura estaba contaminada con vil veneno.
Barundin avanzó un paso para unirse a la refriega, pero lo detuvo Arbrek, que le posó una mano sobre su hombro.
-Esto es brujería -declaró el Señor de las Runas con expresión decisiva-. Yo me encargaré."
Por ponerle alguna pega, pues en realidad no tiene ninguna, hay momentos en los que, a lo mejor, entre una página y otra han pasado diez años tranquilamente, hecho que, si no te fijas bien, desconcierta. Hay que prestar mucha atención a estos detalles para no liarnos. Pero es solo en ocasiones puntuales.
Resumiendo, esta es la historia de Barundin, un rey enano, al principio algo joven y novato al jurar el cargo (tiene gracia lo de joven, pues tiene 150 años, apenas nada para los de su raza), que es observado con lupa por todos sus súbditos, cuya inexperiencia hace que cada decisión que tome sea seguida al detalle por los distintos dirigentes de su pueblo, y que, con el pasar de los años y cantidad de inconvenientes en el camino, irá madurando hasta convertirse en un digno rey para los suyos.
Sé que por aquí no son muy de fantasía épica, pero si algún día deciden aventurarse con este libro, que por cierto es muy cortito, estaré encantado de conocer sus impresiones. A mí me ha encantado; al margen de las batallas, a cuál más emocionante, he descubierto un sinfín de curiosidades de esta raza (mi favorita dentro del género fantástico), sobre su marcada personalidad, sus aspiraciones, las relaciones que tienen con otros pueblos, sus laberínticos y majestuosos hogares bajo la tierra, la artesanía y el poder de sus runas, sus dioses, sus obsesiones, su lealtad y coraje... En fin, aventuras geniales para abstraerse de los problemas mundanos.
Holaaaa.
ResponderEliminarESta vez no me veo tentada, porque es el género el que no me suele atraer. Me lo puedo saltar alguna vez... pero me cuesta muchísimo.
Por cierto, ¡¡tienes que poner Insomnio en en el blog!!
Besitos.
Sí!! Ya mismo tenéis por aquí mi tercer retoño, jajaja. Tengo que actualizar la página de autor.
EliminarUn beso ;)
Tampoco es un género que me tiente mucho, aunque de vez en cuando sí que me animo. Lo tendré en cuenta para esos momentos.
ResponderEliminarBesotes!!!
Sí, ahora que lo dices, no he visto mucho libro de este género en tu blog, pero bueno, nunca digas de este agua no beberé, jajaja.
EliminarUn beso Margari ;)
Vaya, pues aunque se te ve muy emocionado y el libro es corto, a mí estas batallas se me hacen bola y no hay manera. Además me da la sensación de que todo el tiempo está pasando lo mismo.
ResponderEliminarEsta vez no me lías.
Besos
No, no lo veo muy para ti, Norah, pero bueno, lo disfruté tanto que no podía dejar de reseñarlo.
EliminarUn beso ;)
No es un género que suela leer, pero por la nota que le has dado y lo que cuentas, tiene que ser un buen libro para los amantes de ese género. Creo que puede ser un buen regalo para alguien que conozco...
ResponderEliminarBesos
Pues mira, si la persona que dices es amante de la fantasía épica le tiene que encantar.
EliminarUn beso Aylavella ;)
Te estaba leyendo y estaba imaginando la cara que pondría un amigo mío si tuviera este libro, te lo juro 😋 esto es para David: David, si estás leyendo esto no significa que te lo vaya a comprar yo, sino que aquí tienes un buen título para que te lo compres tú, por una vez 😂😂😂
ResponderEliminarEstoy deseando tener "Insomnio", que duermo demasiado 😁😁😁
Besitos carinyet 💋💋💋
Pues nada, David, hazle caso a Yolanda si nos estás leyendo. Si te gusta la fantasía épica, este es ideal para ti. ^^
EliminarY yo de que lo leas, guapa. Qué ilusión me hace.
Un beso ;)
La verdad es que estas novelas no me llaman la atención. Prefiero centrarme en otros temas. Un beso.
ResponderEliminarGracias por pasarte a comentar.
EliminarUn beso Aliena ;)
Yo antes creía que no era de fantasía épica, sobre todo porque "El señor de los anillos" no me había gustado mucho, la verdad. Pero desde que descubrí a Sanderson y a P. Rothfuss estoy que no paro :-) Así que indagaré un poquito más :-)
ResponderEliminarBesos.
Me alegro, no ya de que te llame la atención el libro, sino de que con el tiempo te haya empezado a gustar el género. Uno de mis géneros favoritos, pero que, irónicamente, raro es el libro que me atrape completamente.
EliminarUn beso Anabel ;)
wow! debe ser fantastica, nunca mejor dicho,jeje! saludosbuhos
ResponderEliminarSí que lo es, jajaja. Me hizo pasar muy buenos ratos.
EliminarUn beso ;)
Hola Ray!! Tiene muy buena pinta, no sabía de este libro y viendo lo mucho que te ha gustado no puedo ignorarlo. ¡Genial reseña! Besos!!
ResponderEliminarMe alegra que te haya llamado la atención.
EliminarUn beso Ana ;)
Holaaa
ResponderEliminarNo sabía de su existencia pero se nota que te ha gustado, me le llevo apuntado creo que puedo disfrutarlo bastante
Un besito!
Genial. Espero que lo disfrutes mucho, Naya.
EliminarUn beso ;)
¡Hola! No he leído anda del mundo de Warhammer pero tengo muchas ganas de aventurarme. Me alegra leer que te ha gustado mucho y que has disfrutado, eso es muy importante ^^.
ResponderEliminarUn beso desde Jardines de papel .
¡Nos leemos!
Sí, el libro ha sido toda una sorpresa. Lo tenía en la estantería desde hace algunos años, y la verdad, no sé cómo he tardado tanto en leerlo. Lo he disfrutado más de lo que imaginaba.
EliminarUn beso ;)
A pesar de no ser mi género dan ganas de animarse leyendo tu entusiasmo, me alegra que te haya gustado tanto. Me llevo tu recomendación para una amiga que sé que le encantará ;)
ResponderEliminarBesitos
Pues nada, si a tu amiga le gusta el género este creo que le encantará.
EliminarUn beso Cris ;)
No soy mucho de este género de libros, pero ya tengo a quien regalárselo porque todo este mundillo a mi pareja le encanta. Seguro que él lo disfruta tanto como tú.
ResponderEliminarB7s
Estupendo, como regalo está genial. Espero que lo disfrute mucho.
EliminarUn beso Ali ;)
Este creo que no es de los míos, esta vez lo dejo pasar :-D
ResponderEliminarNo, no lo veo para ti, Rocío.
EliminarUn beso ;)
Hola!
ResponderEliminarYo te prometo que viendo cuanto disfrutas de estos libros me dan ganas de leerlos, pero es como con la serie de "Los hijos de la tierra" que tanto le gusta a Moniki, tengo verdaderas dudas de que a mí llegaran a gustarme... no creo que me anime pero me encanta ver cuanto los disfrutas ^^
Un beso!
Ah, pues si te gusta el género fantástico, todo es probar. Aunque si no te llama, mejor a por otro.
EliminarUn beso Lit ;)
Hola.
ResponderEliminarHace mucho que no leo este género y eso que me apasiona, así que este me lo apunto que me encanta todo lo que comentas, además la reseña me ha encantado de lo completa y entusiasta que es :)))
Muchos besos.
Genial Rubí!! Me alegro que te haya gustado. Si algún día te animas con el libro, que se lee en nada, me encantaría conocer tus impresiones.
EliminarUn beso ;)
Hola!! jejeje el tema de Warhammer me ha acompañado todo el fin de semana. He estado en una tienda en la que vi que la Herejía de Horus iba por la friolera de más de 30 libros ya... hace tiempo que la dejé aparcada porque me terminó aburriendo la espera entre uno y otro libro y había historias que no aportaban mucho. Si me fijé en uno relativamente nuevo, El Ejército de Nurgle, que lo he pedido para reyes jejeje y este también pinta muy bien para estas fechas que se acercan aunque tenga unos cuantos años. Lo mejor es que es uno solo y no tiene muchas páginas (las navidades pasadas cayeron un par de omnibuses y me da miedo meterles mano) y tampoco he leído ninguna historia de enanos dentro del marco de Warhammer así que sería un buen libro por donde empezar. Besos!!
ResponderEliminarNo conozco la Herejía de Horus, pero me he quedado con la boca abierta cuando has dicho que son más de 30 libros. De qué va?
EliminarVaya, por lo que veo estás más puesta que yo en lo que a Warhammer se refiere. Yo aparte de este solo me he leído la serie de Las aventuras de Gotrek y Félix (que si no la has leído te la recomiendo encarecidamente). No sabía que fueras tan fan de este mundillo, lo cual me alegra no sabes cuánto. Ya me siento menos incomprendido. ^^
Un beso María ;)
Hola!! pues van de la traición de Horus, mano derecha del Emperador, a este mismo y al bando imperial. En general están bien porque ves muchos puntos de vista (¿son tan malos los malos y tan buenos los buenos?), se amplia el trasfondo y te enteras de cosas que sucedieron que en la información que hay por internet o en los códex de los juegos no están pero, lo dicho, llevan más de 10 años publicando libros y no saben cuando van a parar. La serie de Gotrek y Félix también la pediré para reyes jejejeje, otra cosa es que me hagan caso!! Besos!!
EliminarAh, pues suena bien. Lo único que me echa un poco para atrás es que sean tantos, pero bueno, no lo descarto. Indagaré un poco sobre esta saga. De la serie de Gotrek y Félix salieron hace poco unos volúmenes ómnibus que están bastante bien.
EliminarUn beso ;)
Este es de los que podrían gustarme, aunque antes necesito terminar unos cuantos pendientes 😄
ResponderEliminarBesos!
Así es, Alicia, este es muy de tu estilo. Estoy seguro de que te gustará mucho.
EliminarUn beso ;)
Huy, pues aunque en un principio no llamaba nada mi atención, al final el argumento ha conseguido captar mi interés. Ya veremos, gracias por la reseña^^
ResponderEliminarMe alegra leer eso. Espero que le des una oportunidad.
EliminarUn beso ;)